Durante el segundo mes de embarazo se forman las tres capas de células que darán lugar a todos los tejidos del futuro bebé.
Se origina la médula espinal, el cerebro, el corazón, el intestino y la piel.
Se forman los ojos, orejas, nariz y labio superior de la boca.
Los miembros se empiezan a desarrollar, llegando a crearse los rayos digitales de las manos que formaran los dedos y, en los miembros inferiores, la placa que formará el pie.
El embrión prosigue su desarrollo: en un extremo se forma una cabeza redondeada y más gruesa que el tronco, mientras que en el otro extremo se forma una especie de cola.
Durante los primeros días de la quinta semana de embarazo se produce la gastrulación.
Las células del epiblasto, que forman el embrión, continúan dividiéndose hasta poseer tres capas o tipos de células: ectodermo, mesodermo y endodermo. Estas tres hojas o capas germinales son el origen de todos los tejidos del futuro bebé.
La gastrulación es, por tanto, el proceso por el cual se forman las tres capas germinales del embrión.
En el mesodermo aparecen vasos sanguíneos que contactan con el pedículo de fijación o cordón umbilical primitivo, el cual une la placenta al embrión y se encarga de alimentar y aportar oxígeno al embrión.
A continuación se forma la notocorda a partir de células del mesodermo.
La notocorda es un cuerpo flexible en forma de vara cuya función principal es actuar de sostén hasta que se forma la columna vertebral.
La notocorda, además, induce la formación del sistema nervioso central al facilitar la formación de un surco en el ectodermo que se cierra dando lugar al tubo neural.
El ectodermo, por tanto, origina el tubo neural el cual, antes de finalizar la quinta semana de embarazo, da lugar a la médula espinal y a nivel de la cabeza se ensancha originando las vesículas cerebrales. Se completa así el proceso de neurulación.
urante la séptima semana de embarazo prosigue la formación del ojo, que ahora toma una coloración negra, y se forman las fóveas nasales y la boca primitiva.
Procede el desarrollo del miembro superior, llegando a formar la placa de la mano que toma el aspecto de un muñón sin dedos y se forman las yemas que darán lugar posteriormente a las piernas.
Se forma el cordón umbilical propiamente dicho a partir del pedículo de fijación.
Al final de esta semana el embrión mide unos 8 mm de longitud.
Durante la octava semana de embarazo se conforma la piel del embrión.
Se forma el primordio de la futura musculatura, situada por debajo del pecho.
El corazón posee ya cuatro cámaras y comienza a bombear la sangre con vigor.
Los ojos están cubiertos por piel, que posteriormente se transformará en los párpados.
Al final de esta semana la nariz y el labio superior se encuentran ya formados.
Las orejas empiezan a adquirir su forma, aunque no se encuentran totalmente moldeadas y ocupan una posición baja.
Se forman los rayos digitales de la mano, que irán creciendo progresivamente para formar los dedos.
Prosigue el desarrollo del miembro inferior formando la placa del pie que toma el aspecto de un muñón sin dedos.
Al final de esta semana el embrión mide unos 13 mm de largo.
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